Los agachados y el METRO CdMx, la traición de la izquierda a las clases populares que aplauden los pobres.
Desde 1997 el metro ha estado en manos de la «izquierda», de la de Cuauhtémoc Cárdenas a las de López Obrador, de la de Marcelo Ebrard a la de Claudia Sheinbaum pasando por el delfín de AMLO: Mancera. Así que todo el desastre del sistema colectivo de la ciudad de México es cosa de ellos.
Desde 1997 y habiendo entrado al sindicato del METRO desde antes, el discurso y ejercicio de poder de la «izquierda» se ha dedicado a amafiarse con el sistema de transporte, con el sindicato por un lado y con ambulantes que a diestra y siniestra se han apropiado de los vagones. Evidentemente la policía está coludida porque frente a los elementos de seguridad están deambulando los comerciantes ilegales e incluso hasta se pelean entre ellos sin que la autoridad se meta.
El METRO es un nicho lleno de malandros, mafiosos, corruptos, ineficientes, negligentes e ineptos personajes entre políticos, policías, ambulantes, sindicalistas. Eso es el gran logro de la propuesta de izquierda, porque esa apropiación de una paratestatal de movilidad la han usado para exprimirla sin hacerla mejor, a toda esa gente no hay quien los contrate en la IP porque los correrían por buenos para nada, grilleros, chismosos, improductivos y ratas.
La joya de la corona del desastre que pone en riesgo la vida de la gente en el día a día -y que parece que ni a los usuarios les importa su propia vida evidenciando su muy baja autoestima- es la Línea 12, la única construida por la «izquierda» que al final se cayó. De ahí para acá más problemas por mantenimiento y por la nula inversión en personal, seguridad, mantenimiento, imagen, justicia y tan solo con esto se muestra la realidad, solo se habían dedicado, y lo siguen haciendo, a vender choros, cuentos, ilusiones para la gente que harta de todo lo vivido con la PRIctadura creíamos que todo podría mejorar pero estos señorcitos han salido peores que lo que vivimos en los últimos 80 años. Es terrible.
Ahora seguiremos escuchando lo de siempre de esta bola de mamarrachos en la jefatura de gobierno y del propio presidente: la culpa es de otros. El discurso más importante de la gente mediocre, que con cinismo y desesperación exhibe AMLO diciendo que aunque la gente diga que la paranoia gubernamental por «sabotaje» lo hará militarizar el METRO lo hará, pobre, pasó de buen speecher a escupitajo de la verborrea. Ahí es uno de sus finales del que se vendió y vendían como Hombre de Estado y quedó como enano de circo de quinta.
El METRO es el transporte por excelencia del que no tiene para auto o para taxi, nunca ha sido tratado como elemento básico de la movilidad de la ciudad en donde ricos, clasemedieros o pobres lo usen para transportarse a donde sea, el sistema se ha estigmatizado y la «izquierda» le ha sacado provecho pero ahora su emblema popular se cae a pedazos. Es decir, no solo fomentaron que fuera discriminador, integrador o generalizado el uso sino que además hoy colocan en riesgo a sus votantes. A los que parece no valoran más que para entronizarse en el poder pero no para darles un bienestar real sino de pura simulación.
La pregunta es ¿Qué tienen en la cabeza los usuarios del metro que aún apoyan a MORENA y a las izquierdas? ¿Dónde quedó la dignidad y la capacidad racional de esos usuarios que no valoran sui seguridad ni su vida? Por eso los usan como borregos, parece que en eso se han convertido de verdad: dóciles, obedientes, no cuestionadores, no críticos, sometidos. Otra vez se convirtieron en lo que fueron por 80 años: LOS AGACHADOS.