Ni rosas ni jazmines
Pareciera que todo sigue igual y no es así, las mentes comienzan a poner en duda al régimen actual de México, la inspiración de Medio Oriente está llenando pulmones y corazones porque no hay más que volver a creer en el poder de la gente.
Siguen apareciendo los estúpidos, los que cometen una y otra vez el mismo error defendiendo lo indefendible. Hay un fatídico gobierno en México que se llena día a día de muertes, veto, censura, violación de leyes, agravios y los estúpidos son los que pese a viendo toda la tragedia salen a poner su cara para amortiguar los golpes que Felipe Calderón se busca. Esta casta ruin y canalla es la que estructuralmente sostiene a este sistema que como vemos no funciona en lo absoluto.
En Egipto la gente presiona para tumbar al faraón, a la vieja momia que no es más que el pelele de los intereses de Estados Unidos, Israel e Inglaterra. Allá la caída de Mubarak haría el gran cambio pero en México no sería posible ya que la dimisión de Calderón no mermaría a la oligarquía de mil tentáculos que ha tomado lentamente a los sindicatos, a las grandes cadenas de televisión, grandes empresas y hasta el mismísimo narco. Un movimiento ciudadano que desee terminar con el drama de este país tiene frente a sí una labor titánica: desmantelar instituciones corruptas, nepotistas, autoritarias y sobre todo hipócritas y camaleónicas que difícilmente se dejan ver abiertamente.
En México no hay jazmines ni rosas, no hay tunecinos ni egipcios, no hay italianas queriendo largar a su Berlusconi (otra gran vergüenza del mundo), hay muchas quejas, mucha crítica y muy poca acción. En nuestro país no hay determinación por el cambio, no somos argentinos, ellos lograron echar a los neoliberales, nosotros ni siquiera les hemos largado de las grandes influencias en el Banco de México o Hacienda. Estamos despiertos pero aletargados. Estamos con furia pero contenida, no hay sol porque no queremos sentir el calor del cambio que es vigente en todo el mundo. Da miedo morir cuando estamos viendo que lo que menos corre en un movimiento popular es sangre ¿acaso la veintena de muertos de la revolución pacífica egipcia se equipara a los más de 30 mil muertos de nuestro país?
¿Por qué en México hay tanto miedo? ¿Por qué sólo se ve la indignación y el enojo pero al paso de los días todo se normaliza? ¿Qué esto ya lo saben los oligarcas de la política y la empresa? México se calma de volada, se estabiliza incluso solo ya que entre los ciudadanos conscientes deambulan los lamebotas que defienden al gobierno y a las instituciones que en nada sirven al pueblo.
Hoy cuando vemos cuando el mundo totalitario de Medio Oriente ve sus horas apocalípticas el circo deportivo y el colonialismo gringo se mantienen sin problema sosteniendo un status quo ficticio. Este fin de semana miles de dólares llevaron muchos mexicanos al Super Bowl. Mexicanos que son segregados en Estados Unidos, que son vistos como sirvientes o gente a la que hay que echarle a la migra acabando el partido. Esos sujetos que nacieron en nuestra tierra se olvidan de todo el daño que justamente los grandes empresarios que patrocinaron el evento son los que financian campañas racistas y las guerras. Todavía los más listos se quejaron de que no había nada que señalar cuando todos usamos twitter o facebook que son de Estados Unidos sólo que esta tecnología tiene una pequeña diferencia, el gobierno de Washington les odia porque no puede controlarles como pasó con Wikileaks. Hay algunos mexicanos contestones con deficiente nivel de análisis y altísimo nivel de berrinche, estúpidos que defienden a la derecha cuando ésta sencillamente fue.
¿Habrá rosas, jazmines o tulipanes para México en 2011?