Un país agotado de grilla barata.

MORENA se equivoca muchas veces y tiene permanentemente un error: hace grilla barata de manera cotidiana metiendo cizaña en las redes, odio en los discursos y chismes en oficinas, hospitales y escuelas públicas. La vieja manera de operar de los sindicalistas chafas es la manera de operar de los morenos. No construyen: destruyen.

México se cansó ya de la nula oferta de MORENA, el presidente es el que porta el estandarte de la política indeseable, la baja, la corriente, la vulgar, la del chisme de quinto patio en donde se busca mostrar como el mejor siendo, evidentemente, el peor. Atrás quedaron los foros o coloquios sobre democracia, filosofía, arte o valores republicanos con escritores y pensadores, las universidades se durmieron y solo se dedican a dar clases, no inciden en la vida del país y cuando la UNAM aparece solo es para mostrar su decadencia. Se convirtió en un lugar de sátrapas y corruptos que no buscan renovar las élites de la medicina, la economía, es el monstruo de la mediocridad sistematizado en sus estudiantes que pueden desde 2023 plagiar lo que quieran sin consecuencias.

Sin respaldo popular docenas de funcionarios de muchos niveles, hasta gobernadores, caminan en eventos esperando la efervescencia del pasado reciente donde todos querían sacarse selfies con sus «héroes» de la política. No cabe duda, la operación acarreo llena plazas pero los discursos no interesan, la gente se hartó de la misma perorata. No cabe duda, la peor llanta del coche es la que siempre rechina y MORENA solo sabe rechinar.

Las universidades Benito Juárez no han hecho absolutamente nada relevante para el país, a duras penas medio sirven, no reclutaron a los mejores maestros, se abrieron para crear la ilusión de que los estudios universitarios traen justicia social, algo que como hemos visto en la historia de la educación superior lo único que hace es hacer del mediocre un titulado sin sentido, sin calidad, sin compromiso. se engaña a la gente, se simula que se hace algo pero solo se desfonda al país con más mentiras.

Las matanzas continúan, ciudades asediadas y aterrorizadas por la muerte y el crimen dejan de funcionar como Culiacán, Córdoba o Coatzacoalcos. La prosperidad dejó de existir mientras solo se hacen discursos dignos del año 1970 con conservadurismo del más rancio, el presidente, su mujer, no dejan de ser esclavos del estilo de vida de los tiempos de la Reforma. AMLO entrega como nunca al país a los extranjeros y quiere reescribir la historia llena de ideología absurda y chabacana para ensalzar a los jodidos, no a los pobres de dinero nada más, sino a los que no tienen nada que ofrecer n ideas, busca reivindicar a la chusma, a los desarrapados que fueron desde siempre usados para empoderar o destruir gobiernos, los quiere de su lado, los compra. Se los dice en su cara. Los trata como a perros. Se los dice en su cara.

Se necesita renovar y refrescar al país, nuevos aires deben correr enalteciendo a lo único que no da libertad en estos que son los últimos tiempos de los Estados modernos: la democracia y la república, pilares de la justicia y por ende de la paz.

Nada nuevo vendrá de MORENA, su gente es la gente del PRI de antes, del que hizo que México se pudriera económicamente y educativamente, quieren otra vez hordas de estúpidos aplaudidores que busquen el favor de los señores para encontrar justicia, medicinas, lugar en las escuelas, una oportunidad de trabajo.

La oposición mediocre se quedó en el nivel del presidente, no pueden imaginar un mejor páis, solo saben hacer lo que los llevó a la derrota en 2018. Pierde México, pierde la gente. ¿Hasta cuándo?

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