AMLO el merolico loco.

Cuando en 2017 decíamos que Peña Nieto había enloquecido con sus estupideces jamás imaginamos que llegaría alguien más bruto y más cantinflesco que respondiera a la mentalidad de la mexicanada chafireta najayota del país. Y llegó López Obrador.

AMLO es un producto político hecho para lo que era el pensamiento mexicano del siglo pasado, por eso aún responden algunas personas que en su involución se resisten al siglo XXI ya casi a un cuarto de que transcurra dicho periodo.

AMLO es un Cantinflas combinado con Chespirito diseñado desde comunicación social para entretener al público de Televisa que aún existe, solo que ni Televisa ni AMLO se han podido ajustar al mundo contemporáneo, por ello hablar de lo que fue el medio de comunicación más poderoso del país es irrelevante, valió madre y así le pasa al presidente, él se cree sus mentiras, sus shows, sus «ocurrencias» perfectamente llevadas como guion. En sus mañaneras a veces le sale lo Chilindrina, lo Popis, lo Doña Florinda, interpreta a todos los personajes con un look entre doctor Chapatín y Bruja del 71. Según él funciona, la realidad es que un payaso no gusta con los chistes viejos. Ni Brozo se quedó en el pasado.

AMLO es el loco merolico de verborrea chafa que echa chistes y carrilla y se comporta como bravucón contra el gringo imperialista, cosas que ya no le quedan a la política mexicana. Ya no es 1970.