El descontrol de los obradoristas- nomenklatura.
Los miembros de la nomenklatura de morena y obradoristas, solovinos, pejezombies, están un descontrol total. Por un lado tienen un líder que desquiciado y alejado de quienes lo llevaron al triunfo como Tatiana Clouthier, Elena Poniatowska, Victor Toledo o Ricardo Monreal y por el otro apoyan a los porros como Batres o Layda Sansores, corruptos de ultranza como Bartlett, payasos corruptos como Taibo y para colmo deben apoyar a las corcholatas impresentables: Adán, SHAMEbaum y Marcelo. Están en el abismo. Perdidos.
La guerra que lanzó SHAMEbaum contra Sandra Cuevas, alcaldesa de la Cuauhtémoc, ha sacado a la luz la desesperación de la sirvienta de la gentrificación y globalista jefa de gobierno que quiere ser candidata a presidente de México, pero también nos enteramos gracias a ello que esta mujer, Claudia, compró al abogado de los niños asesinados por negligencia y corrupción del colegio Rébsamen, y lo hizo contralor de la CdMx, una verdadera malandronada corrupta.
Mientras la locura arrebata el gobierno al presidente y a la CdMx miles de ciudadanos promueven una nueva movilización nacional para el 26 de febrero en el zócalo de la ciudad de México y en todo el país, el desquiciamiento en las redes es impresionante, los solovinos, mascotas, pejezombies, nomenklaturientos, enardecen cuando se publica el flyer de la marcha. Impresionantemente se ponen como poseídos por los demonios del abismo que pelearon en la cumbre del Celebdil con Gandalf.
Hoy los que se fundieron y mantienen en un partido sin ideología donde la compra venta de candidaturas es lo cotidiano buscan tomarse del marxismo progresista comunista para decir que piensan y acaban repitiendo frases de propaganda pedorra digna del años 1915 en Rusia. Pura pendejada sin pies ni cabeza, sin plataforma, cosa que les hace carecer de argumentos. Hoy se exhiben las manadas obradoristas como lo que son: burros, estúpidos, colonizados por marxismo leninismo y maoísmo, ignorantes, negligentes, mediocres y cabezas duras frente a la cascada inagotable de críticas, cuestionamientos y exhibiciones que la ciudadanía hace en TikTok, Twitter o Facebook.
Se pondrán peor pero su nivel intelectual no les da para combatir a la libertad. Estarán más aferrados y más estúpidos se verán, demos al tiempo la oportunidad de generarnos la gran carcajada con la que serán pateados en el 2024 de la silla presidencial.