Free Man and Love Man
Manuel García Estrada
«Enamórate, corre riesgos, seguramente triunfarás y serás feliz toda la vida.»
Carta de Esperanza, mi abuela, 4 de octubre, 2002.-Lo intento todos los días abuela.
La gente que está en una plataforma más plena te lo hace ver al dejar de lado las creencias de los ordinarios amaestrados, de esos que llenan los templos con obediencia y que se escandalizan del amor en todas sus potencias.
Cuando en los libros de autoayuda le dicen a las personas que deben encontrar pareja… es decir, alguien parejo a ti no mienten. Es real.
Aspirar a menos de lo mejor que se ha experimentado es mediocre.
Algunos mediocres incluso se venden como hombres libres pero al momento en que se escandalizan del amor y la libertad plenos nos queda claro que siguen siendo esclavos de lo que jamás dejará soñar a los despiertos.
¿Cómo se atreven los mediocres a aplicar por una oportunidad en el reino de los corazones plenos? Estúpidos, quizás debieran primero prepararse más en sexualidad libre, en gozo de dar y recibir, de besar y ser besado, de penetrar y ser penetrado, de compartir la lengua de tu amante con otros que en conjunto generan placer etéreo para todos.
¿Cómo se atreven los mediocres a querer estandarizar la felicidad con base en sus reacciones emocionales primitivas? Que ridiculez que los grises, los medianos, quieran que la felicidad se reduzca a la manipulación de las canciones y las drogas, son pequeñas mentes en manos de los medios, de los señores de los templos y de los oráculos de la perfidia.
¿Cómo se atreven los mediocres a aspirar a ser tus amantes cuando apenas saben respirar y tener orgasmos que copian de las películas porno? Ridículos que llenan sus vidas con marcas comerciales y que aspiran a parecerse a los que ellos admiran y que carecen de lo básico para ser capaces de ser relevantes… servir al resto.
Hay quienes hacen cosas que te piden que tú no hagas… y cuando las hacen solitos se develan. Les dan culpas, se sienten fatal… y lo evidencian. Patéticos.
Yo me aprendí a reír de ese tipo de personas, para mi son animalitos del bosque. Así, en su farsa de vida pretenden posar su nuca en mis almohadas con aspiraciones a eternidades que no son capaces de construir…
Después de experimentar el amor verdadero solo puedes quedar en esa expectativa, en encontrar otro amor verdadero al mismo nivel de entrega o más.