La República se defiende con valor.
Cabeza de Nabo, hay que tener valor.
Sofi. El Castillo Vagabundo. Estudios Ghibli.
La reforma absurda y bodria de AMLO está sufriendo por causa de su prepotencia y arrogancia, por intentar tratar a todos como si fuéramos sus criados, sus gatos, por intentar manipular a senadores como si fueran estúpidos y niños que necesitan la voz de un padre para arreglar su recámara. Nada más alejado de la realidad: los sueños guajiros del déspota del Palacio Nacional.
Hoy, como tantas otras veces, no es la primera vez que ocurre, hay que tener los huevos necesarios para detener a los enemigos de la república y la democracia, los enemigos de la libertad y de la posibilidad de construir mundos en conjunto.
El Senado de la República es hoy la esperanza de millones de personas que representados por el millón de mexicanos el 13 de noviembre en 50 ciudades salimos a detener al marxista maoísta que quiere quedarse en el poder al estilo de la PRIctadura que tanto nos costó largar. Esto no es fácil porque las medidas de reforma del presidente están en buen término con lo que Davos quiere: control total de la población para administrarnos como ganado a favor de los intereses de unos cuantos.
El modelo zurdito maoísta del Foro Económico Mundial que se impulsó a través de las mentiras de la pandemia 2020-2021 quieren que se aceleren en México a través del regreso de una dictadura monolítica de partido de Estado como el de China o Cuba en donde usando a las grandes empresas de comunicación y a los dueños del PIB mantendrían a la población en la represión y opresión sin límite de tiempo.
Lo que se discute en el Senado es la posibilidad de que esta imposición de Davos tarde aún más en lograrse, quizás para que cuando el tiempo llegue México no esté ahí al 100%, sometido. Los legisladores quizás no ven esto pero en esta comunidad entendemos mejor de lo que creen lo que está pasando.
Queda en el frente de batalla el legislador que se ha convertido en insignia de los que no nos sometemos al poder absolutista de AMLO, al que ha traicionado cuanto ha podido el presidente pero que hoy ha llegado a su límite: Ricardo Monreal.
La reforma no pasará y de hacerlo será rechazada en la Suprema Corte y nada de lo que imaginó AMLO en su masturbación totalitaria mental sucederá. Querrá arrebatar la presidencia de manera grotesca pero sigue sin entender que para los mexicanos es más importante la nación que la facción llamada MORENA.
Día de valor y fuerza en el Senado y en todas las mentes de los ciudadanos.