Nos despertamos y el dinosaurio… había cambiado de piel.
La mentalidad priísta con la que nos educaron ha dado resultados después de un siglo de la revolución mexicana cuando los cuatreros se convirtieron en generales financiados por los gringos para obtener armamento y derrocar a un gobierno nacionalista.
Esos sujetos que armaron «la bola» y que sin sentido mataron y violaron para destruir la estructura del país y luchar por ideas un tanto marxistas se casaron con las niñas bien para que pudieran legitimarse socialmente, se hicieron del poder, construyeron un partido de Estado y nunca dejaron ser los barbajanes que eran solo que tenían una variante, sus descendientes eran educados desde las familias bien y así de pronto el robo de Plutarco Elías Calles se convirtió en un fideicomiso de archivo fotográfico en un palacete de la Condesa. Cabe mencionar que muchos «revolucionarios» que despojaron a los ricos de sus inmuebles -hasta el propio Vasconcelos lo hizo-, aparecían después como señores.
Los pseudo revolucionarios financiados por Estados Unidos construyeron al PRI, un partido mafioso que acaparó organizaciones campesinas y obreras, que forzó a la organización de cámaras de comercio para controlar a los empresarios, etc; ejecutó el plan más maoísta y castrista sin que esos mismos se lo hubieran imaginado o incluso, en el caso de Castro, nacido. Pareciera que el propio PRI inspiró a otros partidos de Estado al control total de la población.
Los límites también exigidos por los gringos y a raíz de la segunda guerra mundial, fue que había que pintarse más demócrata aunque no fuera así, a tanto se atrevió el PRI que necesitaba asegurar su reinado: llenó la educación de aberraciones en donde los bandoleros revolucionarios eran los nuevos padres de la patria, con eso legitimarían los apellidos de la nueva aristocracia y prácticamente se les debería el favor de «liberarnos», nos llenaron de mentiras, impusieron al servilismo como algo bueno, a la obediencia como algo favorable y al ser agachón como lo propio de la buena educación. Se impuso un modelo donde la docilidad era de la gente educada en donde no se debería de hablar de futbol, religión y política porque eso generaba problemas en las familias. Es decir, nos hicieron creer que el debate, base de la República, era algo malo.
Hoy cuando después de muchos muertos y muchas marchas, muchos movimientos y muchas rebeliones de las clases medias, el país asoma un poquito a la democracia entre partidos descendientes del PRI, creados por el PRI, construidos por el PRI, mostrados como oposición por el PRI, en el PRI se sienten fuera del control del feudo México. El que debe ser granel y mano de obra barata de Estados Unidos y que le debe a los gringos el haberse hecho del poder en el país y que hoy reclaman otra vez control total.
Estados Unidos ha sido muy bueno para la estrategia de control de los mexicanos, financió y asesoró el control del PRI, ha permitido adaptación a tiempos demócratas pero reclama que el país se mantenga pobre y la mejor manera de lograrlo es hacer nuevamente un partido de Estado, uno que reivindique las mismas tonterías que los «revolucionarios» del siglo pasado en donde los pobres son mejores que los ricos, los ignorantes son igual de valiosos que los sabios y los ilustrados, donde se anima a la mediocridad y a ser estúpido pero estar del lado de los ideales del zapatismo o villismo en boca de López Obrador.
A los gringos les conviene mucho que el neo marxismo prospere porque sabe que con ello garantiza mano de obra barata, hambre y necesidad para los pueblos sometidos y que lo que den será recibido con agradecimiento y aplausos aunque cada vez haya más control y sometimiento para los mexicanos. Al país que más le conviene el obradorismo es a Estados Unidos, la política de destrucción del sistema de salud, educación, artes y ciencias, cultura, pauperiza la mente de los habitantes del país. Algo muy favorable para que México ni en sueños se desarrolle y le haga competencia.
Hoy despertamos y el financiado dinosaurio no se había ido, solo cambió de piel… con el apoyo de Estados Unidos.