Prohibido pensar

Manos arriba, esto es un asalto a mente crítica. Enciende el televisor y no pienses. Ten fe.


Prohibido pensar. Compra, gasta, compra papel de baño, compra cubrebocas, el dinero es para eso. Los banqueros te cuidan y quieren, saben lo que es bueno para ti. Pensar hace que duela la cabeza y si eso pasa consume cualquier producto que se oferta en la tv para que no mueras. Mucho gel anti bacterial, por ejemplo.


Prohibido pensar. Repite y haz lo que hace el resto, eso está bien. Todo está bien. Aléjate de los demás, no toques a nadie, no tomes sol.


Prohibido pensar. Si no levantas tu bandeja en la franquicia de comida rápida eres un mal educado, ayuda a la empresa a no pagar empleados. Todo está bien, hay luz eléctrica, petróleo, hasta reciclas la basura que producen las empresas, eres gente “buena”.


Prohibido pensar. Compra esa ropa de marca, viste como se te dice, no son apariencias. Es como la justicia, verdadera y real. Prohibido pensar, ya tienes en la televisión los programas que necesitas para ser feliz y las opiniones de grandes intelectos para ello, tienes una Mañanera en la cual debes confiar ciegamente y aceptar todo lo que promueva. Prohibido pensar, las instituciones lo hacen por ti. No son corruptas, son buenas, ellas sí saben qué es bueno para ti y si en tu religión o partido no te pelan pues salta de una a otra de esas instituciones.


Prohibido pensar, no te salgas de las ideologías y las religiones, quédate así, dividido, partido. Todo está bien, ve de compras. La religión es preciosa, mira como ha hecho que la gente sea buena, se da mucha limosna a los muertos de hambre ¡qué bonito!  Y el Peje, Peña o Fox, Manlio, Ebrard, Calderón, Elba Esther, Norberto, Gatell, ellos sí saben qué es lo mejor para ti.


Prohibido pensar, en el Congreso de la Unión lo hacen por ti; los partidos lo hacen por ti. Confía. Cree. No entiendo de qué se queja la gente si hay malls, muchas franquicias, los pobres están en el campo, no se ven, y hay mucha tv que divierte, además ya reciben su limosna institucionalizada en becas y apoyos, se sofisticó el poder de la caridad cristiana, esa, la del Vaticano que necesita pobres para existir y ser rico. Para qué preocuparte si la política es de izquierda o derecha, las religiones y las empresas ven por tu bien. No pienses. Ten fe y si no logras creerlo, evade la realidad con droga, alcohol, no sé, cómprate una vida aunque sea de Instagram o Facebook. Confía.


Esto es el mundo lógico: los futbolistas son millonarios, las celebridades también, los científicos son pobres y los niños se educan con la tv. El mundo está lleno de justicia, olvida a Nochixtlán, a los ayotzinapos o a los masacrados en Reynosa o a los niños asesinados de Veracruz, no dudes y no salgas a la calle, hay mucho sol, te vayas a contagiar de vida con el aire puro. No dudes de nada, ve como todo está bien, hay libre comercio, muchos bancos extranjeros, eres feliz, no hay vacío, no hay contaminación. Y cuidado, estamos bajo alerta terrorista, alerta ambiental, alarmas pandémicas, no respires, no pienses, no te muevas.


Nos han hecho creer que no tenemos por qué pensar ya que el Congreso y el presidente saben lo que nos conviene, la OMS, la OCDE; la Suprema Corte ejecuta de manera eficaz la justicia y los industriales tienen responsabilidad social, así pues no contaminan y donan sus ganancias a programas sociales y por supuesto los programas de la tv nos dicen cómo peinarnos, comportarnos, tratarnos los unos a los otros y por supuesto nos iluminan en qué es lo que uno debe ver como importante. Dejando al mundo secular lo mismo ha hecho la religión al decirnos qué es lo que está bien o qué está mal sin derecho a cuestionarlo. Así pues, no tenemos que pensar. Ellos lo hacen por nosotros.


Manos arriba, esto es un asalto a la mente, está prohibido pensar porque se ha diseñado ya un mecanismo en donde la iglesia, un partido político, los industriales y la mayor parte de los medios de comunicación masiva o los dueños de las redes sociales están pensando por todos. ¿No crees que ya va siendo hora de que te des cuenta que la democracia genuina es la participativa y directa? ¿Te da miedo pensar? Mejor no lo hagas, te van a llamar paranoico o conspiranoico porque ahora los que piensan son los apestados. Súmate a la manada y sé feliz. Tranquilo. Otros pensarán por ti.

Manuel García Estrada, el hijo del rayo.

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