México en el fin del mundo: Una lectura a distancia crítica.
Cuando un país le da cada vez más poder e influencia al ejército se le dice que se está militarizando, si estos soldados y generales además desplazan a la policía que es el organismo por el cual el Estado, la República, ejercen el monopolio de la violencia nuevamente vemos esa militarización, si el presidente en turno les da cada vez más influencia y pretende reformar las leyes y destruir el pacto de la democracia y de la nación para generar un totalitarismo a partir de un partido único entonces nos tenemos que plantear ¿Cómo nos ven desde afuera?
Si el ejército determina el rumbo de la seguridad y además la violación de su seguridad digital nos muestra que saben qué pasará y en dónde, a quién matarán y cómo, los exhibe como los principales vendedores de armas a los criminales y no pasa nada… significa que hay un desplazamiento de baja intensidad del estado democrático y republicano a un sistema totalitario.
El gobierno de AMLO ha generado todo para que el ejército mande y como no cree en la República porque odia al poder legislativo y quiere tener como a su perra al poder judicial lo que vemos es que hay un intento de golpe de estado en donde una Junta Militar disfrazada de civil asume el poder y control del país.
En México eso suena descabellado porque nos acostumbramos a vivir en la penumbra de las dictaduras de Argentina o Chile y no experimentamos la brutalidad directa sino la guerra de baja intensidad de los 70 y el promedio de la gente se hizo tolerante al abuso, al totalitarismo, al despotismo, y el agachismo y sumisión de millones heredados desde la época prehispánica de someterse al tlatoani salvaje generó que no se viera mal la opresión y represión de la PRIctadura.
La enseñanza de vivir sometidos y agachados permanece en nuestra cultura y por ello no estamos frente a una masa de gente escandalizada por un poder creciente de la milicia y como los medios se la han pasado mostrando a los poderes como si se tratara de estrellitas pedorras de telenovela vemos la idiotez y el abuso de autoridad como algo que puede pasarse por alto.
La realidad es que AMLO si está agachado pero como pelele a los intereses de corporaciones y a la banca internacional que busca un partido hegemónico que aplique las medidas de control al estilo chino. A los grandes señores del dinero y el poder les importa un carajo si hay izquierdas o derechas o si hay democracia o no… lo que les importa es la ganancia.
En México la ciudadanía detuvo el intento obradorista de hacer un nuevo PRI o partido comunista al estilo de Cuba o China con su nomenklatura y toda la cosa, pero si no se sigue en la resistencia frente al déspota del palacio nacional nos van a freír a todos en la pila de los neofeudales -como el líder de Corea del Norte- y mantener pobres y estúpidos como a los cubanos.
Una junta militar es inaceptable y disfrazarla de civil es más inaceptable. ¿Estará México en el fin del mundo?