La mexicanada solo sabe aparentar
Sin principios, sin auto reflexión, con una historia fundamentada en mentiras los mexicanos avanzan por la vida sin saber ni quiénes son, es tanto su vacío que aparentan ser felices, aparentan ser orgullosos de su país cuando en realidad no saben de dónde vienen y por eso no saben qué quieren, por eso se entercan en no reconocer errores al seguir a falsos profetas que disfrazados de buenitos con discursos populistas quieren seguir sosteniendo como política verdadera para un cambio verdadero que no es más que un conjunto de arengas sin sentido porque quizás tuvieron razón de ser frente al hartazgo de la PRIctadura pero ahora cuando los que se llenaban la boca de reivindicaciones simplemente los traicionaron o cambiaron de opinión.
En estas fiestas patrioteras los pobres hijos de la pseudo medicanidad, la mexicanada, asiste como borrego a aplaudir un grito libertario que nunca existió, Hidalgo gritó Viva Fernando VII, es decir, viva el rey en 1810, no clamó por independencia alguna y duró en la revuelta 16 semanas que sería mucho más larga que ese tiempo pero al final le sirve a los que reescribieron la historia para sostener al régimen del siglo XX con mitos, leyendas o «datos históricos» para manipular a la gente que con un legado poderoso la convierten en una bola de estúpidos que no alcanzar a pensar ni a discernir si hay o no lógica en los relatos.
La historia se arregla a modo, la escriben los vencedores -los «generales» de la revolución del PNR- y la mantienen como propaganda pura para legitimarse en el poder.
La mexicanada gusta de sentirse machita, patriarcal, mentar la madre y hacerse valer por sus huevos, no por sus ideas, de las cuales no saben ni cómo elaborarlas y cuando logran generarlas están basadas en mentiras históricas, filosofías escolásticas y en la cosmovisión del peladito.
Esa mexicanada es la aplaude y mata en partidos de fútbol o llena las redes sociales con insultos al que cuestiona o piensa distinto, la mexicanada es fruto además de la mediocridad y gusta de lamer tlatoanis para sentirse buen sirviente del poderoso para que los demás lo respeten, la mexicanada es patética e inmadura, evade responsabilidad y siempre culpa a alguien más de sus errores.
Quizás por eso México sea donde más se toma coca cola, donde más se sigan usando cubrebocas, donde grupos de fanáticos siguen aplaudiendo al presidente más mentiroso de la historia después de Juárez.
