Mujeres a parir.
Al personal del hospital Mónica Pretelini de Toluca, por salvar a tantas mujeres.
México es un país en donde las protagonistas son las mujeres, desde hace años son ellas las que han estado guiando al país de maneras muy inesperadas y a veces trágicas. Son inteligencia y sentir y merecen que se les reconozca por ello. El tema sobre este género a mi me parece sumamente importante y por ello le brindo constancia o terquedad todo el año, no sólo un día (aberrante es llenar auditorios cada 8 de marzo para aplaudir a las que venden libertad estando sometidas).
Hay estados en donde no puede haber ni un solo festejo a las mujeres como el de México en donde los feminicidios avanzan por no decir que arrecian en una sociedad machista y católica que reprime, oprime y suprime a las que son usadas como cuota de género en la vida política de la entidad mientras son maltratadas, vejadas y asesinadas muchas de ellas en todos lados.
Las mujeres son la marca del México actual, ejemplo de ello son Elena Poniatowska, Ana Gabriela Guevara, Lydia Cacho, Natalia Lafourcade, Alondra de la Parra, Mónica Fragoso, Sandra América Rodriguez, Carmen Aristegui, Verónica Volkow, Sanjuana Martínez, Ishtar Cardona, Liliana López Borbón, Regina Orozco, Diana Mancilla o Joann Novoa que con vitalidad y entrega guían al género al respeto y admiración de toda una nación. Hay de todo como en botica, mujeres como Consuelo Sáizar que recorre el país construyendo a favor de la cultura o como Elba Esther Gordillo, arrasando con lo que queda de la educación. Hay otras que ya no están pero que también transforman a México como Susana Chávez, Ernestina Ascencio o Marisela Escobedo.
Yo sigo convencido que ante la fuerza de las mujeres la represión enfermiza de los feminicidios permanece y crece y es hora de que todos esos involucrados en los hechos de lastimar y asesinar mujeres terminen pero también estoy convencido de que eso no ocurrirá mientras las mujeres no tomen por asalto al país llenando plazas, parques, edificios y universidades para exigir condiciones de desarrollo en libertad.
Mientras haya mujeres que obedezcan a hombres que vestidos de mujer rigen en los templos, mientras haya mujeres que en lugar de llenarse de enojo lloren ante los jefes o maridos, mientras haya mujeres que esperen que les digan por quién votar o si tienen derecho o no a embarazarse o abortar este país no tendrá madres en toda la extensión de la palabra.
No sirven de nada los discursos públicos sino hay de verdad una homologación salarial a las mujeres, mientras no haya gobernadoras o presidenta, mientras sigan habiendo señoras que calladas lloran por causa de un marido grosero y violento que es amparado por una religión de dioses y vírgenes muertos que dictan hasta cómo respirar.
El poder está en cada una de las féminas que puede o no obedecer paradigmas y dogmas. El poder está en la rebeldía y en el talento, pero sobre todo en el valor y la responsabilidad de que este es también su país y que ellas, las que alimentan cuerpo y mente de los niños y niñas, son la otra posibilidad de desarrollo ante un modelo liderado por machos que han llevado a México a esta tragedia.
En la Asociación de Creadores para el Desarrollo Social fundamos bibliotecas pero ¿saben cuándo? Cuando el liderazgo comunitario es encabezado por mujeres. Cuando nosotros nos reunimos con la gente y las vemos entre el público, y de entre ellas se destacan las abuelas, sabemos que tendremos biblioteca nueva. Así ha sido en el 95% de los casos. Nos queda claro que todo está en la decisión de creer que “querer es poder”, el día en que se las mujeres lo crean este México será absolutamente parido por ellas.
2011